Fernando Achucarro: "En la adversidad el artista florece"

El artista Fernando Achucarro

RM: Tu obra en general está cargada de rostros impregnados de angustias, dolor, masoquismo, llanto… ¿por qué has elegido este camino de comunicación con el público?

FA: Para que uno pueda vencer los miedos, tristezas, dolor, soledad, etc.,  tiene que aprender a enfrentarlos. Gracias al arte, puedo enfrentarme cada segundo a “ellos”. Quiero que el público pueda ver en mi trabajo, una forma de vencer aquello que uno no quiere ver.

RM: Entonces, ¿se puede decir que tu arte es una autobiografía visual?

FA: Se podría decir…Pienso que cada obra responde a la vida de uno.

RM: De esta manera, ¿qué significado adquiere la palabra Arte?

FA: EL ARTE para mí es, la propia vida… Es el vacío que llenamos con cada obra creada.

RM: ¿Cuando estás frente al soporte actúas de antemano planificando o la acción transcurre espontáneamente a medida que se va ejecutando?

FA: ¡Buena pregunta!… todo lo que hago está bien estudiado, yo niego el accidente.. ¡NO EXISTE EL ACCIDENTE EN EL ARTE!

RM: ¿Negar el “accidente” responde a tu creencia de que todo el Arte es una previa elaboración minuciosa?

FA: Sí… ¡Tendria que ser esa forma! ¿No te parece? entonces caemos en lo casual, ¡HAY QUE NEGAR EL ACCIDENTE EN EL ARTE!

RM: ¿Y qué piensas de aquellos creadores que optan por la casuística como una forma de pensar el Arte?

FA: Me parece bien, CADA UNO CON SUS COSAS…

RM: “UNA FORMA DE VENCER AQUELLO QUE UNO NO QUIERE VER”, decías al comienzo de esta entrevista con respecto a tu arte y sabes que este pensamiento me sigue dando vueltas por lo profundo que es y además por el significado que a partir de él adquieren tus creaciones al reflejar un mundo invisible y cotidiano que nos rodea. ¿Crees que tu obra es comprendida?

FA: Yo creo que es un poco difícil el saber eso… hay gente que ve mis cuadros, “miran” un rato y se van; otros que “ven”, se quedan un rato y luego te buscan, uno siente cuando la persona tiene o no tiene ese fuego del interés de ver AQUELLO.

RM: En tu trayectoria has tenido la posibilidad de que personas de distintas partes del mundo aprecien tu mensaje. ¿Cómo es la respuesta en Kansas?, lugar donde estás mostrando tus obras actualmente.

FA: Lo único que varía es el idioma…

RM: ¿Podemos confirmar una vez más la universalidad del arte?

FA: ¡Claro que sí! El arte siempre fue, es y será ¡universal! el arte está en todo, debajo de una piedra, en el viento, en la oscuridad, en la luz… ¡es decir, en todo!

RM: Me haces recordar al gran Walt Whitman … ¿El artista debe tener poesía en las venas?

FA: ¡CLARO! lo uno sin lo otro no puede existir, es mi opinión. Cada línea que uno traza es una frase, un párrafo… e inclusive uno puede decir con una sola línea todo un libro…nosotros “dibujamos letras”, pintamos párrafos y frases…Lo que uno no puede dibujar, lo tiene que escribir; si no se puede decir con esas dos herramientas, lo tiene que decir en forma de música, TODO está unido de una u otra forma.

RM: ¡Y en vos la música late al compás de la caja! y del arte… Recuerdo haberte visto en un local del pasaje Carlos Gardel en Buenos Aires donde me conmoviste con tu increíble sentido artístico.

FA: ¡SI!!...¿COMO VOY A OLVIDAR ESA TARDE MAGICA EN EL BARRIO DE GARDEL?.Siempre fui un creyente de que el artista debe de conmover en cualquier situación que se encuentre, con una sola línea, con un solo compás… Nada debería ser un impedimento para que uno saque algo para devolverlo a la humanidad, en las dificultades de la vida… ¡en todo momento! ¡EN LA ADVERSIDAD EL ARTISTA FLORECE!

¡EL TODO es el material del artista!

RM: ¿Quién ilumina el camino del artista?

FA: ¡UNO MISMO! ¿Quién más?

RM: ¿Y en ese sendero, no encuentra antorchas que ayudan a ese desplazamiento?

FA: Creo que la fuerza está en uno mismo, las antorchas son muy importantes, dan fuerza para seguir adelante en este camino duro y a veces oscuro… las antorchas son las que dan ese calor y luz a la fuerza interior.

RM: ¿Que representan los grandes maestros del Arte?

FA: Representan los pilares en que uno edifica su arte, su oficio, su vida… son los compañeros en los momentos de duda.

RM: ¿Surgen en ti momentos de dudas sobre lo que realizas?

FA: ¡Por supuesto! creo que nadie puede decir lo contrario, las dudas siempre están, pero hay algo mucho más grande que la duda: LA CONFIANZA EN LO QUE UNO CREA.

RM: En tu caso, esa confianza ¿qué te permite?

FA: Sobreponerme a la DUDA, que esos demonios de la mediocridad salgan corriendo y que por sobre todo ¡EL TRABAJO sea mi escudo!

RM: José Ingenieros decía que la lucha contra la mediocridad se daba cuando el ser humano tenía un constante afán de superación.

FA: ¡Por supuesto! y yo digo que la PERFECCION ES LA SUMA DE LOS ERRORES… Siempre mirar adelante y VER mediante el trabajo constante, la LUZ de la sabiduría.

RM: Una lámpara encendida aparece constantemente en tu obra… ¿es consecuencia de esta sabiduría que mencionas?

FA: No, en realidad no, es una larga historia, pero, te la hago corta, eso que ves es “EL FOCO”, es la imposibilidad del hacer, representa todo lo que uno no puede hacer, las cosas simples de la vida… como atar un cordón, cambiar el “foco” de tu pieza, hacer algo tan simple como subir una escalera. TODO ESTO EMPEZÓ, CUANDO YO ESTABA EN MI PIEZA UNA NOCHE, SIN LUZ, CREO QUE ESE PROBLEMA YA VENIA TENIENDO POR UNA SEMANA. MI PAPA VINO Y ME RETO ¡MUCHO! DICIENDO… “¡¡NO SOS CAPAZ NI DE CAMBIAR TU FOCO”!!!!! LUEGO DE AHI SALIÓ EL SIMBOLISMO DEL FOCO.

RM: Es como un sello distintivo de tu obra…

FA: Sí. Creo que sí… entre otras cosas más.

RM: ¿Como por ejemplo?

FA: Frios pasillos, ventanas, sombras, puertas entreabiertas, paisajes desolados, personas sin ojos, etc. Entre otras cosas…

RM: Ahora toda esta cosmovisión tan genuinamente ACHUCARRO que apunta no solamente a mirar ese primer plano sino todos los detalles, ¿serían como indicadores del gran mensaje?

FA: Si, una obra de arte se compone de varias notas, compases, frases y todo ese conjunto lleva a formar la obra.

Tratar de que el ojo educado pueda recorrer la obra y llevar al espectador a ser protagonista de la imagen.

Tratar de que cada línea cada centímetro creado, sea como el buen vino deslizándose por la garganta.

RM: ¿Hay una hilación temática en tus creaciones?

FA: Si, creo que por eso soy un artista serial. Una idea me obsesiona por mucho tiempo, van apareciendo cuadro tras cuadro las ideas, modificándose con cada cuadro creado.

RM: Eres un artista muy prolífico… Es impresionante ver en tu estudio la cantidad de trabajos desarrollados, muchos de ellos inéditos aún, esperando salir a la luz. ¿Cuántas series están ahí?

FA: Gracias por lo de prolífico, ¡yo amo el trabajo! el secreto de todo está en el trabajo diario… sin eso no tiene sentido seguir. Tengo alrededor de 10 series, algunas de ellas con 15 obras para arriba, ahora trabajando en dos series, en dibujos individuales y estudios para nuevas series.

RM: ¿Estas series tienen un correlato entre sí?

FA: En cierta forma si, trato al menos de que cada serie sea así.

RM: ¿Qué sentís en ese momento sublime de la creación?

FA: Al comienzo, al ver la hoja en blanco, siento TERROR, ansiedad, tristeza… luego eso va pasando gradualmente y se transforma en la fuerza para seguir adelante. Van pasando pensamientos de la vida, la familia, problemas, cosas felices y tristes, hay veces que casi no pienso en lo que estoy creando, pero eso ayuda a poner los pies en la tierra y sentir que no estás solo y por supuesto están los maestros del pasado y ÉL…

RM: ¿Crees en la presencia Todopoderosa?

AV: Creo en el orden de las cosas, la Naturaleza, el Universo, la Ciencia y en mi caso EL ARTE, tiene que haber algo o alguien que sostiene Todo… mi arte es mi forma de agradecer al TODO… uno cuando trabaja está en contacto con el Todopoderoso, es nuestra manera de comunicarnos con el otro lado.

RM: ¿Y tus escenas están en relación a una cosmovisión Bíblica de denuncia?

FA: ¡NO, para nada! yo solo trabajo para poder conocerme a mí mismo…

RM: ¿Eres tu propio psicólogo?

FA: Yo pienso que si… Todos tendríamos que ser de esa forma… ¿en quién confiar si no es en uno mismo? pero hay veces que esa confianza se transforma en algo relativo… uno podría ser su propio enemigo… Lo único que nos queda es TRABAJAR, ser verdaderos en nuestro oficio.

RM: ¡Tú eres un apasionado del trabajo! ¡Lo afirmo una y varias veces! pero también de la búsqueda de la perfección… ¿Si miras hacia atrás notas tu evolución artística?

AV: Como te dije, en el trabajo está la respuesta de todo. Siempre uno busca y trata de llegar a eso llamado “perfección”. Si, al mirar mi pasado artístico veo mi evolución y trato de no cometer los mismos errores. Yo creo firmemente que cada cuadro es un error, que uno puede borrar con un nuevo cuadro, el trabajo es nuestra única arma en contra de la nada.

RM: ¿Cómo te ves de aquí a un tiempo, artísticamente hablando?

FA: ¡Mejor que hoy!

© Entrevistas exclusivas, por Roberto Manzanal para Arte Fénix.

Publicado en Artefenix: www.artefenix.net

Fotos: Gentileza del Artista